lunes, 19 de octubre de 2009

FIN DE FIESTA

Hoy ha sido el último día de mi semana de vacaciones, ha sido con diferencia la peor semana de vacaciones de mi vida, y estoy tan pancho, no se si es un signo de madurez, o que me he vuelto definitivamente tonto. Esta semana he estado sin coche, enfermo, además enfermé el día que empecé las vacaciones, apenas me he podido mover de casa hasta hoy, y aún no me he recuperado por completo, aunque voy mejorando. Bueno pues estos días, a pesar del estres provocado por cierto financiero-becario, el cual cometió un error que ha retrasado la llegada de un coche que necesito una semana, o quizás gracias a este y a no poder moverme por la enfermedad que me tiene entre toses que no me han dejado dormir, quizás gracias a todo esto, he podido leer y escribir, y sobre todo pensar y reflexionar con calma, pensar en lo que de verdad importa, y empezar a sacar la cabeza del agua antes de ahogarme definitivamente, por ahora solo saco la nariz pero creo que pronto podré volver a respirar por la boca, justo cuando todo parecía peor, he conseguido salir un poquito a flote, a lo mejor me acuerdo de como se nadaba contra corriente y soy capaz de salir del todo. Parece mentira pero el pasado domingo habría agradecido ser aniquilado, y hoy en cambio a pesar de los pesares estoy bien, estoy casi a gusto conmigo mismo. Estoy racionalizando, estoy evolucionando, y avanzando hacía una vida levemente feliz, prevenido contra la neurosis que me agota mentalmente, y liberándome de cierta obsesión que estaba acabando conmigo, ahora ya solo es algo que me apetece, ya no es necesario, ya no es algo contra lo que luchar o con lo que vivir las 24 horas del día, ahora es solo un aliciente más, para seguir adelante. Hoy aprecio de verdad lo que tengo, me he divertido, a pesar de estar tirado, debilitado, a pesar de casi no dormir, aunque esto es algo casi natural en mi. He recuperado alguna vieja afición, estoy aprendiendo a hacer cosas viejas que parecen nuevas. No nos engañemos de momento nada es maravilloso aún, pero todo está casi bien, se que vienen tiempos duros para algunas cosas, pero también se que estoy más preparado para pelear por mi y por todo lo que de verdad me importa. Se que me voy a equivocar igual o más que antes pero honestamente puedo decir, que intentaré hacer las cosas mucho mejor que hasta ahora y que por supuesto, voy a dejar de quejarme y voy a tirar con lo que haga falta para conseguir que todo vaya lo mejor posible, desde ya, voy a ser mejor persona. Esta vez si, se acabó el llorón.
Besos, mil besos.

No hay comentarios: