martes, 7 de diciembre de 2010

EL BOCADILLO

A veces, el detalle más nimio puede cambiar el mundo, definitivamente y para siempre. El 28 de junio de 1914 Franz Ferdinand, heredero del Imperio Austrohungaro y su mujer, Sofía, visitaron Sarajevo. Franz Ferdinand se había casado por amor, y su esposa no tenía una sangre lo suficientemente noble para ser considerada Alteza Real, el emperador Francisco José había accedido a la boda de estos, imponiendo la condición de que el matrimonio fuese considerado monargático y que los hijos de este no pudiesen se considerados herederos del trono, Sofía siempre sería una segundona en la corte, por este motivo ella casi nunca acompañaba a su marido en actos oficiales, esta vez hacían una excepción, ya que Franz Ferdinand, como regalo de aniversario para su esposa la llevo con él. El motivo de la visita a Sarajevo, capital de Bosnia Herzegovina, eran unas maniobras del ejercito. Escogieron una mala fecha, ya que Bosnia había sido anexionada al imperio en 1908 y había un fuerte sentimiento nacionalista contrario al imperio, y por parte de los nacionalistas existía un sueño de crear un gran país eslavo uniendo Bosnia a Serbia, además el día 28 se celebraba una fiesta de carácter nacional, conmemorando una batalla contra los turcos. Así que, un grupo Nacionalista (que por cierto parecían compañeros de Mortadelo y Filemón) preparó un atentado o varios, contra los herederos. Al paso del cortejo se apostarían en varios lugares con el fin de, o bien dispararles, o bien tirarles una bomba, el primero estaba apostado preparado para disparar, no escogió bien el lugar y no pudo llevar a cabo su cometido, el segundo lanzó un explosivo desde un puente, que cayó sobre el vehículo en que viajaban los príncipes, parece ser que el explosivo fue cogido por el mismo Franz Ferdinand que lo arrojó fuera del vehículo, alcanzando al coche que los seguía, hiriendo a varias personas, por lo que la comitiva aceleró la marcha cambiando la ruta y finalizando la visita oficial de forma apresurada. El terrorista que arrojó la bomba, se tragó una cápsula de cianuro que llevaba para no ser cogido vivo y se arrojo al río junto al que se encontraba con el fin de ahogarse, vomitó el cianuro y no se como pensaba ahogarse, ya que el río venía seco, y solo cubría 10 cm, por lo que fue arrestado tras ser arrebatado a la multitud que lo quería linchar. La comitiva entonces se trasladó al Ayuntamiento, donde los príncipes ofendidos por el atentado, tras rechazar una recepción de las fuerzas vivas de la ciudad, se disponían a visitar a los heridos. Mientras, el tercer terrorista, Gavrilo Princip, tras haber oído la explosión, pensó que el atentado había tenido éxito se marcho del lugar que tenía asignado y se fue a comprar un bocadillo. El coche de lo principes salió del ayuntamiento, pero el chofer se confundió de calle y tuvo que maniobrar lentamente, encontrándose de frente con Gavrilo, que audazmente sacó su pistola y disparó contra Franz y Sofía, hiriendo a ambos, a ella de un tiro en el abdomen y a él en el cuello. Gavrilo ingirió una capsula de cianuro que también vomitó y fue rápidamente arrestado.

Franz Ferdinand y Sofía, murieron a los pocos minutos, parece que Franz para que no se le arrugase la ropa, la llevaba cosida, lo que impidió que se le taponase la herida, y mientras le decía a su esposa, que ella no podía morir que que iba a ser de los niños, falleció. Había 40.000 soldados del ejercito en Sarajevo, y el jefe de la tropa se había negado a rendir honores a los príncipes debido a no tener Sofia sangre real, con lo que fue facil que atentasen contra estos. Parece que Franz era bastante aperturista y liberal para lo que se estilaba dentro de su imperio, por lo que podía interesar quitarlo de enmedio. Después uno de los terroristas confesó que habían sido apoyados por Serbios, debido esto, el Imperio Austrohungaro le dio a Serbia un ultimátum de diez puntos, imposibles de cumplir por un país soberano, que a pesar de todo acepto nueve, pero el imperio Austrohungaro le declaró la guerra, Rusia a su vez apoyó a Serbia, y el imperio Alemán aliado del Austrohungaro, apoyó a este, los Rusos pusieron a varios millones de soldados en la frontera con Alemania, que sabía que cuando empezasen las hostilidades serían atacados por Francia que no había digerido la derrota de 1870, así que un día de agosto todos empezaron una enorme carnicería, que costo la vida de millones de hombres, a la que se fueron añadiendo varios países con sus colonias, hasta que los USA entraron y ganaron la guerra para Francia y el Reino Unido principalmente, que por cierto la tenían perdida frente a Alemania.

Al final el bocadillo de Gavrilo, costó la vida a decenas de millones de personas, el fin de cuatro imperios ( el Alemán, el Austrohungaro, el Otomano y el Ruso) así como la subida al poder de los comunistas, una paz vergonzosa que a su vez trajo a los Nazis y una guerra aún más grande.

Así que cuando vemos las noticias y pensamos que un hecho aislado no va tener consecuencias, a veces es solo porque o bien hay un Dios que a pesar de todo, a veces nos cuida, o es solo por pura suerte o casualidad, ya que lo de Corea puede ser mucho más gordo que todo esto, lo de Marruecos puede derivar en mil cosas impredecibles, la guerra de Afganistan, Irán, Rusia con Chechenia, Irak, África desangrándose, el clima, la pobreza de unos, la riqueza de otros, el petroleo que se acaba, la crisis que no se acaba nunca... Joder! Es que te pones a mirar un poco y puede dar hasta pánico, ya que hay mil cosas que pueden estallarnos en las narices sin darnos cuenta. Pero a pesar de todo y no se porqué, parece que nos vamos librando de una hecatombe y que nunca va a pasar nada que nos arrastre a una catástrofe a nivel global. Esperemos que sea así por mucho tiempo, o al menos hasta que vuelva a coger ritmo de escribir, entonces no os preocupéis, pasaran cientos de años.

Besos, mañana, o pasado, o al otro, más.

No hay comentarios: