Siete de Abril

Veréis si algún día es malo en mi vida, ese es el siete de abril, desde hace once años, nada más y nada menos, el siete de abril, me toca una depresión al recordar un acto mezquino, cometido por mi, no penséis en nada grave, ni nada que no suceda todos lo días, lo que pasa es que obré en contra de mis principios y dañé a alguien muy querido y que no se lo merecía, ni siquiera sucedió en 7 de abril, sino en diciembre, pero este puto siete de abril es el día que ha quedado grabado a fuego en mi memoria, parece como si los siete de abril siempre hubiese una traca esperándome, acechando, para explotarme en la cara, cuando menos me lo espero, hoy me ha tocado, ni siquiera recordaba la fecha, este año estoy feliz, y no estaba alerta, ante el puto siete de abril.

El trabajo para empezar horrible, estresante, apabullante, apremiante, tengo un abrigo de ante. Al ir al baño, este tiene una luz cenital, lo cual me hizo ver más calvo todavía, me eché a llorar, y solo eran las 10 y 20, a las 10.50, todo terminó, se fue la luz, y a tientas ya que no veía nada comencé a chocarme con todo a mi alrededor, con mi pasado, con mi presente y pasó lo que tenía que pasar, tropecé con mi futuro y cayó al suelo y no pude hacer nada, se hizo añicos, recogí los pedazos, con el fin de recomponerlos, no supe por donde empezar y encima me corté, tras arreglar un poco mi corte, con celo, por lo que ahora está infectado, conseguí meter los pedazos en una bolsa. Pero se que solo no voy a poder reconstruir este futuro tan mono que ya tenía casi empaquetado, llevo desde las 10.50 horas de este puto siete de abril intentando arreglarlo, pero cada vez estoy más convencido de que solo no voy a poder.

¿Me echas una mano? Igual un día de estos lo puedo arreglar solo, pero se que será menos divertido.

Este texto demuestra que tengo que dormir más, y volver a tomar alcohol aunque sea de quemar. Besos, un día de estos volveremos a la normalidad.