sábado, 17 de septiembre de 2011

ALBA

ALBA es mi amigo, o quizás lo era, ya no lo se. Nos conocimos hace unos 16 años, eramos muy jóvenes y en cierto modo muy niños, nos hicimos colegas, nos ayudamos, siempre confiamos el uno en el otro, y nunca, nunca nos fallamos, aunque discutíamos a menudo, pero daba igual, eramos amigos y ahora tengo que escribir sobre él.

Alba es o mejor dicho era Guardia Civil, es una de las mejores personas que he conocido y he conocido a muchas de las buenas, y de los tíos más guapos que he visto en mi vida y a la vez de los más enamoradizos, las mujeres lo perdían, pero no porque fuese un mujeriego, sino porque era el hombre más leal que he conocido, se enamoraba perdidamente y hasta que conseguía a la chica que quería no paraba, sufría, suspiraba y lo pasaba mal, hasta que o bien la conquistaba o se daba cuenta de que no podía ser, entonces estaba un tiempo triste, hasta que se cruzaba otra. Si llegaba a salir con ella, esta le hacía sufrir, hasta que lo acababan dejando, no se puede ser bueno, no se puede ser siempre bueno.  Alba tiene un hermano gemelo, también es Alba, pero este era de otra manera, nunca tuvo el problema de mujeres que tenía su hermano, eran ellas las que suspiraban por él.

Un día se fue de Madrid, se fue a su tierra, él es de Alicante, allí al poco tiempo encontró a Jenni, o quizás fue ella quien lo encontró a él, aún siguen juntos, esto es lo único bueno de la historia.

Creo que fue por la tarde, trabajando, Alba y un grupo de compañeros tuvieron que rodear el chalet de unos narcos a la espera de que llegase una orden de registro, para evitar que nadie saliese, de repente, un todo terreno embistió la puerta de la finca a toda velocidad, por donde estaba mi amigo, arrollándolo,  al caer se golpeó en la cabeza, sus compañeros, no se dieron cuenta en un primer momento de que se lo habían llevado por delante y salieron detrás de los narcos...

Lo llevaron al hospital, al cabo de quizás, demasiado tiempo, en el hospital la acabaron de cagar, al intervenirlo pilló meningitis, casi se muere, y quedó tetraplégico...

Hace unos años, al poco del accidente fui a verlo aprovechando una cena homenaje que le hacían en el Puesto en el que había estado, fui con otro amigo, cuando lo vi, lo pasé mal, su rostro había cambiado, tenía una brecha enorme, hizo un esfuerzo enorme para levantar un poco los brazos...

Hablamos, pero es difícil, ya que ha perdido la memoria inmediata, y apenas recuerda nada de lo que le cuentes al cabo de una hora, puede recordar todo lo que vivió  antes del accidente, todo lo que vivió antes, se acuerda de todo, sabe que tuvo un accidente pero piensa que sigue de baja y espera curarse, lo peor fue oírle decir que no sabía ni cuantos años tenía, con una vocecilla muy frágil que parece que se va a romper en cualquier momento...

En la mesa, estuvimos sentados Alba, su novia, su hermano, mi amigo y yo. Hablamos de todo lo habíamos pasado juntos, nos reímos y estas cosas que hacemos cuando nos juntamos los amigos al cabo de un tiempo sin vernos, pero Alba ya no lo recuerda, no lo recordaba a la mañana siguiente, volvió a preguntarme por mi mujer, por los niños, volví a contarle todo, volví a  hacerlo reír... volvió a olvidar al cabo de un rato.

Después pasamos el resto de la mañana con sus padres que nos contaron lo mal que lo habían pasado, porque aparte de todo el dolor de ver a un hijo así, aparte de lo horrible que tiene que ser ver a un hijo destrozado por culpa de unos hijos de puta, de cambiarlo de hospital para ver si mejoraba, de las horas diarias de ejercicios de rehabilitación, tuvieron que demandar a las aseguradoras que no querían hacerse cargo de nada, al final ganaron, pero a base de juicios y demandas, sus padres son buena gente, con un dolor inmenso que se ve en sus caras cuando miran a su hijo.

Jenni, es la alegría, es otra cosa, sigue a su lado, eso lo dice todo...

Hace mucho que no hablo con él, lo paso muy mal, volviendo a contarle cosas que le he contado mil veces, me siento culpable escuchando esa voz que no es la suya, sonando débil y lejana, así que ahora mismo no se como está. Espero que haya mejorado, que al menos ya no tengan que darle de comer, que pueda andar, que pueda correr, que un día aparezca en la puerta de mi casa y me de un abrazo o una hostia, me da igual, ojalá sea mañana, o mejor hoy, o mejor ahora.

Lo mejor de esta historia, son las personas que la protagonizan, lo peor soy yo y  que es verdad, que esta vez no es un puto cuento de mierda de los que me invento.

Mañana más

3 comentarios:

Miyagi dijo...

La vida tío ...

pradoisdead dijo...

Cierto

Anónimo dijo...

duro... muy duro... pero hay que venirse arriba.
Fran