lunes, 13 de septiembre de 2010

Reforma

En 2005 reformamos nuestra casa, primero buscamos presupuestos y después elegimos al que nos pareció mejor (el intermedio de cinco, ni más caro ni más barato). El encargado de la empresa era un señor con barba y un bonito nombre de pila (el mismo que yo), dijo que iban a tardar un mes y acertó tardaron dos, dijo que la obra iba a costar por ejemplo 10000 euros y acertó, costó 10000 y otros 10000 más, dijo que iban ser pulcros y limpios y acertó, tuvimos que tirar muebles, por que habían sido destrozados, y cuando faltaba un mueble de pladur por hacer, ya hartos, y viendo que el albañil vino borracho(otra vez), los echamos, la verdad es a pesar de todo la casa nos quedó espectacular, entre otras cosas gracias al talento de mi mujer para las reformas. Cuando nos decidimos a hacerla, fui a pedir la licencia de obra al Ayuntamiento, y con mi solicitud en la mano empezamos la obra, el primer día nos presentaron a todo el equipo, en ese momento debí haberlos echado, pero no, no vi lo que estaba claro y diáfano, que eran como Pepe Gotera y Otilio, Pepe Gotera sería el señor de la barba, que por cierto tenía un metro láser chulísimo con el que tomaba las medidas, desconfiad de la tecnología en obreros y obras. Otilio era el otro, electricista de la compañía, después había dos chicos, un sudamericano que era el albañil (un maquinón) y otro chico bastante gordo que era el peón. Como nos pillaron las elecciones municipales y los del Ayuntamiento debían estar quemando papeles por si perdían las elecciones, nunca me concedieron la licencia ni me la denegaron, algo que ahorramos. Llegó el primer día, derribo de paredes, toneladas de mierda por todas partes, escombros por doquier, suelos arrancados, Afganistán dentro de casa, Otilio borracho a todas horas. El albañil diciendonos que si le podíamos pagar directamente que no se fiaba de los otros. Pepe Gotera, que iba con un libro en la mano para hacer la fontanería, ¡adiós!. El albañil que se va y los deja colgados, más material que comprar, el peón casi se hernia sacando cascotes, los plazos se alargan y se alargan, nosotros de alquiler por un mes, prorrogamos a dos, luego fueron tres. Nos visitan los Policías Locales, la petición de licencia les vale (ufff). Hay que comprar más materiales, habían medido mal (Y encima no puedes cambiar de empresa, ya que has pagado un tercio del coste de obra más materiales antes de empezar). Otilio ya no disimula y viene borracho todos los días, ahora hace también la albañilería, en fin, van acabando estancias, unas mejor que otras, el de las cocinas no puede poner la cocina porqué no la dan terminado, acaban por fin, un mes tarde, mucho más caro, pero la verdad es que todo ha quedado bien, faltan cuatro cosillas, nos instalamos en casa, en nuestra casa por fin. Viene Otilio a acabar un mueble de pladur, está totalmente borracho, (lo tenemos que echar). Compramos una estantería de madera que queda genial. Pagamos todo, y la verdad era una casa preciosa, desde esa obra tengo el estomago hecho una mierda, el día a día iba minandonos, ver como te engañaban con ganas de asesinar, viendo como tardaban más y más, como se llevaban de mal,como había que gastar y gastar, parecía que nunca se iba a terminar, pero al final terminó y tras pasar días limpiando y limpiando,porque la mierda estaba, o bien oculta o se reproducía de noche y aparecía de día, acabó bien. A los dos años cambíamos de casa, en fin, tanto sufrimiento para solo dos años, pero bueno como somos masocas ahora estamos reformando la cocina de la casa nueva, nos lo ha hecho un chico que conocíamos y que trabaja de maravilla, que cumple los plazos, pero se trajo a un electricista que no tenía ni idea (siempre sale algo mal), y este la cagó, y una vez acabado todo hubo que abrir el techo para cambiar un cable y tuvo que venir otro electricista para arreglar lo que el otro estropeó, pero será que me he hecho mayor y paso de todo, no me rayo como me rayaba, además, se ajustó al presupuesto ha quedado genial. Ahora solo faltan los muebles de cocina (que esperemos que vengan pronto), que mal se vive sin fregadero.
En resumen, que para hacer una reforma en casa hay que pensárselo dos veces, o mejor tres, nunca, nunca salen bien de todo, siempre hay broncas y dolor mucho dolor.

Besos, por cierto, voy a tener una cocina chulísima cuando por fin acabemos. Estáis invitados a comer para el estreno, no se cuando será, pero ahí queda.

Otro día más.

2 comentarios:

witto dijo...

te tomo la palabra para la "degustación" de tu cocina.

pradoisdead dijo...

tu ya sabes que puedes venir cuando quieras